La caída de los héroes



Dicen que lo que más nos encanta después del ascenso de un héroe es asistir a su caída.

Nos gusta fascinarnos en la historia de su lucha por la gloria, convertirlo en dios por unos momentos, y nos da un gusto culpable verlo regresar a su condición mortal.

Tal vez algo de envidia destructiva nos lleva a desear en secreto la caída. Si bien los héroes nos muestran de lo que somos capaces como humanos, también nos quitan excusas por no ser como ellos.

La figura del héroe es necesaria en toda sociedad. Los relatos orales, leyendas y mitos permiten su difusión. Los héroes son ejemplos a seguir, ideales a alcanzar.

Pero, ¿qué sucede cuando los héroes muestran su lado más humano? ¿Qué hacemos cuando nos damos cuenta de sus pies de barro?

En estas líneas he alabado a Lance Armstrong como un ejemplo de lucha y persistencia. Lance se levantó del cáncer dos veces para ganar la Tour d France siete veces consecutivas. (2000-2006). En el último año (2012) se vio envuelto en investigaciones sobre el posible uso de sustancias prohibidas durante la adquisición de esos títulos. El veredicto fue en su contra y la asociación de ciclismo internacional le retiró esos triunfos.

Como suele ocurrir, hubo detractores del procedimiento indicando irregularidades y una caza de brujas sobre el ciclista. Testimonios de antiguos compañeros de equipo sin nada que perder, la supuesta creación del sistema más avanzado de dopaje de la época que pondría en duda todos y cada uno de los controles realizados a todos y cada uno de los ciclistas del momento.

En lo personal, sí creía en la inocencia de Lance Armstrong y aceptaba los argumentos de cacería personal en su contra. En el momento de escribir esto, se comenta sobre una entrevista que concedió a Oprah Winfrey y que será transmitida la semana del 14 al 18 de enero. Se dice que en ella Lance aceptará que se dopaba. Habrá de ver las reseñas y enterarnos sobre que más dirá.

Mientras tanto, las personas comunes seguiremos nuestros caminos evitando entregarles nuestra devoción a las personas equivocadas. Solo que ¿cómo podríamos evitar adorar a alguien que demuestra tanto? ¿Cómo evitar emocionarte ante personas que nos muestran el mundo de posibilidades que tenemos como humanos?

¿Nos quedará solo el cinismo de decir que todo apesta y que nada vale la pena?

O ¿habremos de ser como el Sol, destinados a ascender, a levantarnos cada día?

Sígueme en twitter: @Alex_Lanzagorta

Comentarios

Entradas populares