Sobre tener un buen año

¿Cómo sabemos que un año ha sido “un buen año”?

¿En qué te fijarías? ¿Cuáles serían tus parámetros de desempeño? Es más, ¿los tienes?

Economía: ¿Mejoraron tus ingresos? ¿Tienes más ahorrado? ¿Liquidaste deudas grandes?

Relaciones: ¿Conociste personas nuevas en círculos distintos? ¿La calidad de las relaciones mejoraron? ¿Fuiste más sociable?

Salud. ¿Hiciste más ejercicio? ¿Cuidaste mejor tu alimentación? ¿Te hiciste revisiones preventivas?

Intelectuales: ¿Cuántos libros leíste? ¿Qué películas viste? ¿Cómo cambiaron tus opiniones?

Etcétera y etcétera. Tu decides los criterios y cómo medirlos.

Hace algún tiempo leí la siguiente frase: “Hay años que quisieras borrar, pero debes tener en cuenta que también los buenos momentos de ese año se perderían”

Los años vienen bien mezclados en los aspectos positivos y negativos.

La víspera de año nuevo nos encontró con el abuelo de mi esposa hospitalizado por una ulcera rectal. El ambiente en la reunión de fue, por decir lo menos, callado y tranquilo. El abuelo salió bien de la operación y se repuso lo suficiente como para fallecer en mayo por “causas naturales”, desconectándose lentamente sin sufrir.

Hubo proyectos que no prosperaron y que solo generaron aprendizaje y gastos. Ideas que no fructificaron por las sutilizas del lenguaje o de los idiomas.

En octubre, y si has seguido la columna lo sabes, fallecieron la misma semana un tío y mi abuela paterna.

Comenzamos la maestría en enseñanza en mayo y tengo un gran grupo de compañeros. En agosto, comenzamos a escribir esta columna.

Los equipos de mis amores siguen haciéndome sufrir y no salieron campeones.

Y así, la lista sigue. Al final el balance fue positivo. Comentando con mi esposa su percepción también fue que ha sido un buen año.

Acta non verba: Recordar es un arte perdido. La gente va tan deprisa que no hace el ejercicio de traer a la memoria como ha sido el año. Ve mes por mes y recuerda hechos, acontecimientos en cada uno. Esto también te ayudará a ver que tu vida es menos rutinaria de lo que crees y que en verdad pasan muchas cosas . Revisa los aspectos económicos, sociales, físicos, familiares, intelectuales. Haz una lista de preguntas base y de ahí sigue. Los resultados te pueden sorprender.
Y si encuentras algo que no te guste, está en tus manos modificar las condiciones para el año que entra. Primero lo que te corresponda a ti y después el influir sobre los demás para que las cosas cambien.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares